El arte de la topiaria o poda ornamental ha tenido cierta época de fama hace unos años gracias a la famosa película de Tim Burton el joven manos de tijeras. Allí, la poda ornamental es llevada al paroxismo en formas realmente originales como dinosaurios, manos gigantes, animales mitológicos, por citar algunos ejemplos. Vale especificar que las formas geométricas, más propias de la estética de nuestros días, también están englobadas dentro de la topiaria.

Las plantas para la poda ornamental tienen que tener cuerpo. Lo ideal son aquellas de ramaje grueso, hojas pequeñas y estructura más bien compacta, es decir, que no crezcan tanto hacia los costados como hacia arriba. A su vez, los arbustos y árboles elegidos para el trabajo de topiaria deben tener un follaje perenne, de manera que nunca caigan todas las hojas en los cambios hacia las estaciones frías, sino que aquellas roten y se renueven, manteniéndose verdes, durante todo el año.

En jardines particulares, resultan elementos muy llamativos como puntos focales aislados que atraen rápidamente la mirada. Donde mejor quedan es en los jardines formales, pero en la mayoría de situaciones van bien como elemento de realce de un espacio. Su mayor inconveniente es que dan más trabajo que otras plantas porque precisan una poda regular. El hecho es que o se mantienen perfectamente perfiladas o mejor no hacer topiaria, ya que el descuido se nota demasiado.

Plantas ideales para la topiaria o poda ornamental

  • Aligustre, en forma de cono o bola.
  • Ciprés, en forma de cono u obelisco.
  • Ficus benjamina, en forma de bola.
  • Ficus nítido, en forma de sombrilla.
  • Laurel, en forma de bola u obelisco
  • Leilandi, en forma de cono, anillo o espiral
  • Pitosporo, en forma de sombrilla.
  • Tejo, en forma de cono, obelisco o cubos.

Algunos arbustos para la poda ornamental son, el Acebo, Aligustre, Boj, Evónimo, Hiedra,  Laurel, Lonicera,  Mirto, Pitosporo, Tejo,  Teucrio, etc.