Los jardines verticales son una de las mejores soluciones para la falta de espacio en muchas casas, especialmente, en las grandes ciudades. Se trata de la forma más eficiente y fácil de poder disfrutar de un trocito de naturaleza en los entornos urbanos. Sin embargo, a la hora de hacer un jardín vertical artificial, es importante tener en cuenta una serie de aspectos para que luzca frondoso y para que las plantas se vean bonitas y atrayentes.
¿Dónde hacer un jardín vertical artificial?
Lo primero que debes hacer para crear un jardín vertical artificial es seleccionar la ubicación adecuada. En este sentido, habrá que tener en cuenta varios factores:
- Escoger el lugar perfecto: lo primero que tenemos que tener en cuenta es que el lugar que seleccionemos sea el más adecuado. Un jardín vertical no deja de ser un elemento decorativo que ocupa cierto espacio, por lo que es importante que el jardín vertical artificial no esté situado en un lugar de paso o en un lugar que pueda molestar en el desarrollo de las actividades del día a día. Así mismo, también es importante. El objetivo de un jardín vertical artificial es decorar, así que no debemos ponerlo en un lugar que no se vea.
- Adecuar el diseño y la estructura al lugar donde lo vamos a colocar: también es importante definir bien qué tamaño y forma va a tener el jardín vertical artificial, ya que esto nos permitirá se más concretos en su construcción.
- Hacer una lista de los materiales que vamos a necesitar: esto ayuda a concretar los elementos que necesitamos para su construcción, lo que también nos ayudará a evitar que compremos más elementos de los necesarios.
Montar la estructura del jardín vertical artificial
Una vez que ya tengamos seleccionado el lugar adecuado para crear el jardín vertical artificial, será el momento de disponer la estructura que permita la colocación de las plantas en vertical. En este sentido, se pueden encontrar estructuras prefabricadas que se adaptan bien a la mayoría de los espacios, especialmente si son pequeños. Sin embargo, también se podrá optar por montar uno mismo la estructura. Para ello, se podrán usar materiales como maderas y alambre, así como botellas de plástico reutilizadas para esta tarea.
Lo más importante a la hora de montar la estructura es que sea sólida y resistente. Es decir, tendremos que hacerla pensando que tiene que soportar el peso de las plantas y, sobre todo, de las macetas. En este sentido, el uso de botellas de plástico recicladas es una buena alternativa, ya que pesan poco, ocupan poco espacio y, además, permiten reutilizar un residuo tan contaminante como es el plástico.